El sol que miro y me cuenta
Exposición Laura López Balza
Siempre que imagino cómo debe ser estar dentro de la cabeza de Laura, inmediatamente me viene a la mente la primera escena de Sonrisas y lágrimas. Julie Andrews gira y se revuelve sobre sí misma en un prado verde en la cima de una montaña, con esa libertad de pensamiento y movimiento infantil cargada de profundidad adulta. Laura López Balza pinta lo que vive y vive como pinta. Todo es sorpresa, tiene luz, peso y mucha inocencia. Su pintura es ella. Delante de su obra, en un primer estadio, nos convierte en una suerte de voyeurs conocidos. Podemos ver qué ocurre entre figuras, flores y colores irreales, pero sin capacidad de interceder o interpretar. Somos meros espectadores de su vida. Sin embargo, en una segunda mirada, en capas internas, comprendemos que Balza ha construido puentes entre lo íntimo y lo universal. Habla de nosotros, con nuestras alegrías, miedos, rupturas y vivencias, a través de ella. Desde esa visión y maneras académicamente poco ortodoxas consigue hurgar en las profundidades del alma humana sin ser explícita ni explicar demasiado. Por otro lado, a nivel técnico, en esta segunda exposición en la Galería Juan Silió de Santander, podemos apreciar una evolución sustancial. Gracias al uso del óleo en sus últimos trabajos, la textura y el cuerpo de la pintura nos hace conectar de manera más directa con cierta lejanía y más sutil a escasos centímetros, así como su refinamiento en el color que eleva su hacer a otro nivel cualitativo. El sol que miro y me cuenta es, por supuesto, una declaración de intenciones como artista, pero también una invitación a observar y conectar con el mundo desde otro lugar, a disfrutar del color por encima de las posibilidades de la realidad mundana y a dejarnos ser niños de nuevo o adultos sin complejos. En definitiva, a mirar y sentir con ella. Javier Ruiz Pérez
Laura López Balza (Arenas de Iguña, 1984) Es Licenciada en Bellas Artes, Universidad del País Vasco. Entre 2007 y 2009 realiza los Cursos de doctorado, Universidad del País Vasco y en 2016 se gradúa en Filosofía en Universidad de Valladolid. En 2008 realiza el curso “Arte y creatividad; hacia la educación creadora a través del arte”, Museo Guggenheim de Bilbao. En 2011, “Jornadas de trabajo, Morfología de la naturaleza”, Alcalá de Guadaíra, Sevilla y un Taller de ilustración avanzada, en la Escuela Massana, Barcelona. Al año siguiente, “I Curso de Realismo y Figuración para Pintores”, impartido por Antonio López y Andrés García Ibáñez en Almería. En 2014, el Taller con Arnal Ballester en Ilustratour, Valladolid. Entre sus individuales destacan El sueño de los dos pájaros, en Galería Juan Silió (2022) o Pintar para ver, en galería La Gran, Valladolid (2018). Por su parte, en Portugal, Mundos, en Ó! Galeria, Oporto (2018); Ó! Galeria, Lisboa (2016). Algunas de las colectivas en las que ha participado son Vert-Jaune-Rouge (2018), Instituto Cervantes, Dakar (2016), In/out, Museo Patio Herreriano, Valladolid (2017). En 2016, como finalista del Premio BMW de pintura en Centro Galileo, Madrid. Fue finalista de la 33 Muestra de Arte Joven de la Rioja o del XVIII Certamen Nacional de Pintura y Escultura “Ciudad de Melilla”, 2017. También destaca su puesto de finalista en IV Premio a la producción artística Fundación Banco Santander, 2016. Finalista del Premio de Artes Plásticas del Gobierno de Cantabria, 2017, ha ganado en la edición de 2022 el premio al artista cántabro.
Horario: Martes a sábado 10:30 - 13:30 / 18:00 - 21:00 h.
Galería Juan Silió
C/ Sol, 45 bajo
Lugar: Galería Juan Silió
Dirección: Galería Juan Silió, Calle del Sol, 45, 39003 Santander, España