Exposición.
La exposición se compone de varias fotografías, obra de Miguel Ángel de Arriba, que inmortalizan el espectacular paisaje valluco y sus gentes, ofreciendo una nueva visión de uno de los valles de mayor riqueza cultural y medioambiental de Cantabria.
Además, el recorrido por esta muestra se acompaña con la palabra a través de topónimos, gentilicios, expresiones y vocablos propios del lugar, que se entremezclan con breves fragmentos de las ordenanzas de los diferentes núcleos poblacionales.
En estos textos jurídicos, redactados desde los siglos XIV-XV, se fijaron por escrito los usos y las costumbres, la idiosincrasia y los mecanismos de funcionamiento de una sociedad rural que ha pervivido a lo largo de varios centenares de años y que hoy podemos revivir a través de sus útiles, en muchos casos únicos.
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