Pisa de Ledantes
Junto al río se conserva un artilugio primitivo de madera que se usaba para tupir lana. Declarado Bien de Interés Local, BIL.
El arroyo suministraba la fuerza motriz para poner en marcha uno de los ingenios hidráulicos más importantes en los siglos pasados.
Elemento etnográfico.
La Pisa o Batán de Ledantes es la mayor reliquia etnográfica que se conserva en la comarca lebaniega; es un ingenio hidráulico, construido con madera de roble, que se utilizaba para golpear, desengrasar y enfurtir las telas, con el fin de obtener unos paños tupidos y resistentes, como producto final de los tejidos confeccionados con lana. Estas toscas máquinas de madera, movidas mediante energía hidráulica, se sitúan en las proximidades de los ríos y constituyeron la primera operación en la industria textil que se logró mecanizar mediante el empleo de la rueda hidráulica. Son escasos los restos materiales de este tipo de artefactos hidráulicos en Cantabria que, en sus últimos tiempos de actividad, fueron reconvertidos en molinos harineros o fábricas de luz, perdiendo su función y características originales.
El armazón de la pisa está formado por una estructura de postes, vigas y cargaderos que sirve de apoyo a tirantes pendulares en los que se insertan sendos mazos. La pieza principal es una vigorosa rueda dotada de una sucesión de áleves, que, al girar, por efecto de la fuerza hidráulica, hace rodar el eje.
La pisa dejó de funcionar a mediados del siglo pasado. Sin embargo, se reconstruyó en el año 2007, en el mismo lugar donde estuvo, puesto que se conservaban muy pocos restos de la misma.
Al encontrase al aire libre, a orillas del camino en la ribera del río de San Andrés, se encuentra siempre disponible para su visita, dar un pequeño paseo desde el pueblo siguiendo el cauce del río.